Clase media

May 15, 2016 por

Hace unos días FARO DE VIGO publicó una interesante y también diría preocupante noticia, sobre la retrocesión de la clase media en España, derivada de la crisis económica que estamos padeciendo en el último decenio. La verdad es que se trata de la culminación de un vasto conjunto de circunstancias que está afectando al equilibrio económico y a la capacidad de desarrollo y bienestar, no solamente de nuestro país sino también en Europa, aunque en menor medida.

La degradación de la capacidad económica no se ha visto paliada por el efecto compensatorio de las políticas públicas; no obstante creo que es importante destacar que nuestro país, debido a la importancia de la educación, sanidad, el sistema de pensiones e infraestructuras públicas sigue ocupando un lugar destacado en el mundo, tal como indica el índice de desarrollo humano de la ONU, que nos sitúa en vigésima posición.

Las causas de la pérdida de peso de la clase media -migran unos tres millones de personas al grupo de rentas más bajas- hay que encontrarlas en la disminución de los salarios, la extensión de los contratos a tiempo parcial y el aumento de autónomos o dicho de otra forma, trabajos muchas veces precarios por cuenta propia. Así mismo, persiste aunque con mejoras un nivel de desempleo muy elevado.

Las rentas sostienen el consumo y la inversión, por tanto se trata de una cuestión sustancial para que todo el sistema pueda funcionar. No tener rentas implica menos consumo, menos recaudación de impuestos y por tanto más pobreza y dependencia. Es importante luchar contra la pobreza, pero creo que haríamos mejor si nos preocupamos por el impulso del trasvase de nuevos efectivos hacia la denominada clase media que al fin y al cabo, con su capacidad de compra y pago de impuestos son esenciales para que la economía funcione.

Para comprar un coche, un piso o para vestirse es obvio que lo que se necesita es dinero y ese dinero para la mayoría de la población proviene de su trabajo, del trabajo adecuadamente retribuido. Por tanto es muy mala noticia para la economía cuando la gente no tiene suficiente para vivir. Hemos entrado en un nuevo proceso en el que hay muchos empleados que perciben rentas por su trabajo que son insuficientes para vivir. Es un asunto crucial al que hay meterle el diente cuanto antes.